tendencias de la vida digital y reflexiones personales de Jaime Estévez
Como una de las mecas de las tecnologías de la información, India se precia de tener un millón de trabajadores cualificados en el sector TIC. Bangalore y Hyderabad son el foco de este desarrollo.
Pero 1.000 millones de indios no tienen email ni ordenador en casa. Los cibercafés proliferan en las zonas turísticas donde los viajeros consultan su correo mientras el dependiente copias las fotos de su cámara digital en un CD. Yo no vi a ningún indio conectándose a Internet en dichos locales.
La religión, siendo mucho más importante para ellos, se conviere en el eje de todos los conflictos. La India tiene 900 millones de hindúes, 150 millones de musulmanes, 30 millones de cristianos, 24 millones de belicosos Sijs, 10 millones de pacíficos budistas, 5 millones de bucólicos jainistas, 90.000 parsis o zoroastristas y 17.000 judíos.
La mencionada Hyderabad fue el pasado sábado objeto de un indiscrimado atentado perpetrado por un grupo islamista de Bangla Desh en el que murieron 45 personas.
Cachemira, antigua joya turística de la India, es hoy un país ocupado. 8 millones de musulmanes viven fiscalizados por 200.000 soldados hindúes y las desapariciones en los últimos 10 años se elevan a más de 4.000. Es imposible recorrer 3 calles andando o 500 metros en coche sin que un uniformado exhibiendo su Kalashnikov te exija la documentación y, eventualmente, te cachee en busca de cualquier objeto comprometedor. Por su parte, los extremistas islámicos han logrado que hoy sea casi imposible tomarse una cerveza en este paraiso entre montañas.
El sistema de castas sigue plenamente vigente y los matrimonios siguen siendo, mayoritariamente, de naturaleza concertada. Las vacas deambulan famélicas hasta morirse de enfermedad y agotamiento en territorio hindú, mientras que en el Himalaya, tuteladas por pastores pasthunes, lucen hermosas hasta que acaban en el puchero.
El Ganges está mas sucio que nunca. Cada 100 ml de agua del río a su paso por Benarés (Varanasi) contiene 1,5 millones de bacterias fecales. El límite fijado para no comprometer la salud es de 500 unidades. Sin embargo, cada amanecer son más los peregrinos hindúes que lavan sus pecados en estas aguas.
El nacionalismo mantiene unida a la gran India, a pesar de que el inglés ha terminado por aceptarse como un mal necesario que permita hacerse entender a los hablantes de las más de 100 lenguas oficiales del subcontinente.