tendencias de la vida digital y reflexiones personales de Jaime Estévez
domingo, noviembre 30, 2008
'Malviviendo': ya está aquí la nueva ola audiovisual
Impresionante lo que se puede hacer con muchas ganas, pocos recursos y unos sólidos conocimientos de producción audiovisual para la red. Y es que ya avisaba el productor Pancho Casal, que ya está aquí la nueva ola audiovisual:
Mobuzz y sus tres comunidades (que en realidad son cuatro)
Mobuzzpasará a la historia de Internet como una experiencia pionera de WebTV que fue capaz de lanzar y mantener un producto de calidad, atractivo y de referencia para miles de usuarios y emprendedores de todo el mundo. También pasará a la historia de los negocios, esta vez con minúsculas, como un caso de gestión fallida de las respectivas comunidades de interés.
La primera comunidad, la de los denominados 'A-List'fue la comunidad mejor gestionada por el fundador de Mobuzz: frecuentes vuelos internacionales, cesiones de capital sin contrapartida económica, cenas y comidas en los restaurante de moda... fue suficiente para lograr la adhesión incondicional de los grandes creadores de opinión en la blogosfera y, en muchos casos, prescriptores relevantes para los inversores. Esta fue la comunidad que le permitió 'sacar pecho' al proyecto.
La segunda comunidad, la de los anunciantes, fue una comunidad insuficientemente atendida por una empresa cuya viabilidad pasaba necesariamente por los ingresos publicitarios. Además de desarrollar el producto hay que desarrollar el negocio y eso pasa, entre otras cosas, por constituir un departamento comercial que vaya más allá del modelo 'relaciones públicas'. Lograr determinadas campañas de anunciantes de prestigio como Honda, Cutty Sark o Levi´s es bonito pero la rentabilidad sólo llega cuando se demuestra la cintura necesaria para atender a clientes de menos brillo pero que están dispuestos a gastarse 30.000 euros en Mobuzz como afirma este usuario de elmundo.es. La negligente gestión de esta comunidad fue la que debilitó a la empresa.
La tercera comunidad, la de los usuarios, fue utilizada siempre como moneda de cambio para mantener el interés de los inversores. Cuando su función primaria como espectadores se demostró insuficiente para lograr financiación se les requirieron nuevas utilidades como la de generar ruido (buzz) y la de contribuir personalmente con sus ahorros para mantener el proyecto vivo "hasta enero que todo se tranquilice". El peso que la empresa atribuía a esta comunidad se manifestó durante los últimos años en tímidas iniciativas como 'NewsRoom', con una promesa de participación real de la audiencia que al final se quedó a medio camino. Sin embargo, la fidelidad de esta comunidad, arengada a su vez por los 'A-List' leales al fundador, fue la que más cercana estuvo de salvar a Mobuzz de su destino final.
Pero aún hay una cuarta comunidad, que a la postre, resultó la decisiva: la de todos los empleados que, sin tener parte en el capital de la empresa, fueron utilizados para movilizar conciencias y recaudar fondos, generalmente en contra de su propia voluntad, inermes para la protesta debido a los meses sin cobrar y el miedo a quedarse en la calle sin siquiera un finiquito justo. Una propuesta como lo que en su día hizo Marek Fodor de que las donaciones fueran directamente a los empleados y ellos voluntariamente decidieran si invertirlas en sostener el proyecto o en cobrarse los atrasos pendientes hubiera superado esta dramática divergencia de intereses. Sin embargo, las promesas reiteradamente incumplidas y la desinformación sistemática a la que les sometió la empresa minó su paciencia y esperanzas hasta el punto de que el 'ultimo show de Mobuzz' llegó en realidad por la negativa del equipo de publicar nuevos episodios si no cambiaban las circunstancias. El detalle que mejor ilustra esta situación es la firma del comunicado de cierre de Mobuzz: Mientras que originalmente era 'el equipo de Mobuzz'quien suscribía el mensaje de despedida, las protestas de sus ex-empleados obligaron al fundador a modificar el texto para firmarlo con un escueto 'Mobuzz'. El maltrato hacia esta comunidad fue lo que finalmente mató el proyecto.
¡Mobuzz vive! Ahora llega el momento de reclamar transparencia
A las 23:32 del domingo 9 de noviembre, minutos antes del fin de plazo marcado para completar la colecta de 120.000 euros necesaria para la continuidad de Mobuzz, y con una recaudación efectiva de 33.200 euros desde al pasado martes 4, aparece en la web de Mobuzz el videopost 'Mobuzz está vivo' que, en boca de Anil de Mello, fundador y CEO de la empresa, dice lo siguiente:
"Hola a todos, soy Anil y antes de nada, quiero dar las gracias a todos por la enorme ayuda recibida en los últimos días. La semana pasada os pedimos ayuda para poder seguir emitiendo los próximos tres meses, que era el tiempo que necesitábamos para cerrar los acuerdos que garantizasen el futuro de Mobuzz."
Efectivamente, nos pidieron el máximo esfuerzo para reunir entre todos 120.000 euros, que era lo que les costaba aguantar tres meses más. Y nos dijeron que si no lo lográbamos, cerrarían y nos devolverían lo aportado.
"Hemos recaudado 33.200 euros. Pero tan importante o más que el dinero enviado ha sido el apoyo de miles de personas en la web, lo que ha hecho que la situación de Mobuzz sea conocida por muchísima más gente de la que podíamos imaginar."
En realidad, ha sido mucho más importante el ruido generado, ya que, según sus cuentas, con esta recaudación apenas les da para sobrevivir 15 días. Es más, a posteriori, da la impresión de que el auténtico objetivo era generar ruido (=buzz)
"Gracias al impresionante respaldo recibido de vosotros, la semana pasada se nos abrieron nuevas puertas y se cerraron algunas de las iniciativas en las que estábamos trabajando. Por ello, creemos que ahora estamos en mejores condiciones para resolver la situación y que podemos hacerlo en un plazo más corto de tiempo."
Cabría preguntar si 'resolver la situación' es lograr la entrada de nuevos accionistas o hacer de Mobuzz un proyecto rentable, autosostenido en el corto plazo. En todo caso ¿han logrado cerrar acuerdos durante esta semana? ¿han obtenido promesas que les permiten confiar en nuevos acuerdos con accionistas, proveedores o clientes a corto plazo?
"Y la mejor noticia es que volveremos con nuestros shows a partir del martes."
De esto me alegro sinceramente. Pienso disfrutarlos como espectador de pago.
"A los que nos habéis enviado ayuda económica, esta misma semana os mandaremos un email explicando la situación. Creemos que sois vosotros, quienes nos habéis tratado con tanta generosidad, los que debéis recibir una respuesta."
Yo preferiría que explicaran públicamente la situación, tal y como públicamente han explicado el problema y públicamente han pedido ayuda. En cualquier caso, del mail al post sólo hay un paso.
"Hoy me siento feliz de poder decir 'nos vemos mañana en Mobuzz Tv' ¡Gracias a todos!"
De nada y hasta pasado manaña!
Desde la publicación del video de salvación, me han llamado la atención varias reacciones de conocidos blogosféricos:
- Enrique Dans explica en su blog: "Las microdonaciones y el fortísimo impacto del buzz generado - un efecto para nada buscado inicialmente pero que ha terminado siendo muy importante - han posibilitado la llegada de opciones que antes parecían más alejadas en el tiempo, como la entrada de nuevos socios y la firma de acuerdos de contenido y comercialización de espacios publicitarios que serán anunciadas en los próximos días"
y añade, al final del post:
"los que donaron recibirán en los próximos dias un mensaje ofreciendo la posibilidad de recibir una devolución del dinero, asi como el detalle del uso de los fondos y las próximas acciones que la compañía llevará a cabo para mantenerse en activo. Nada podemos decir de los acuerdos hasta que estos estén definitivamente firmados, pero éstos ofrecen a la compañía muy buenas posibilidades y un futuro prometedor."
Martín Varsavsky cuenta en su blog: "concretamente la acción de pedir ayuda para un start up funcionó no solo para obtener donaciones sino que se generó una enorme ola de notoriedad que atrajo a muchos anunciantes que probablemente van a apoyar con su publicidad a Mobuzz en los próximos meses."
Desde estas líneas no me queda más remedio que aconsejar a Mobuzz un esfuerzo suplementario de transparencia para evitar que prolifere un término que ya he comenzado a leer esta noche en twitter
Actualización 16-11: Durante el EBE 08 Antonio Delgado y Delia Rodríguez grabaron la siguiente entrevista con Anil de Mello, en la que el CEO de Mobuzz aporta nuevos detalles sobre cómo ocurrió todo y cuál es su situación actual:
1. Achacan todas sus dificultades a la crisis sin asumir la más mínima autocrítica:
"Hoy Mobuzz es un proyecto consolidado en su programación, con cinco programas en tres idiomas y con un nivel de visitas que muchos quisieran para sí. Estamos en un momento en el que, en circunstancias normales, podríamos haber empezado a generar ingresos para mantener el proyecto con vida. Pero la crisis se nos ha cruzado de sopetón no sólo porque ahora resulta mucho más complejo conseguir publicidad, sino porque la gente que estaba dispuesta a invertir se está pensando mucho más los pasos a dar como consecuencia de una crisis que también les está afectando a ellos" vía El blog del Capi
¿realmente todo es achacable a la mala suerte? ¿es normal que un proyecto con cuatro años ya de historia y millones de euros invertidos esté tan lejos del break even? ¿no hay nada que hayan hecho mal?
2. Intentan mostrar a un equipo de trabajadores cohesionados en torno a un objetivo sin lograrlo:
Significativamente, han resaltado en la columna de 'donantes' aquellos accionistas y trabajadores que tienen blog y se suman a la campaña desde su blog: Anil de Mello, Javier Capitan, Enrique Dans, Osiris y GabeMac
Sin embargo, no aparecen enlazados los nombres de otros trabajadores veteranos en cuyo blog no se hace ninguna referencia a la campaña como ocurre aquí y aquí
Mientras que en algunos ámbitos se insinúa que desde la dirección se pretendía cerrar y que fueron los trabajadores los que decidieron impulsar esta campaña para mantener vivo el proyecto, en privado ellos te cuentan que la campaña fue propuesta desde arriba y que logró una adhesión únicamente parcial de la plantilla.
3. No se ofrecen soluciones, únicamente se pide dinero:
"mantener Mobuzz cuesta 50.000 euros al mes. Necesitamos de tu ayuda hasta que completemos el nuevo plan de financiación".
No proponen un plan de viabilidad para reducir costes y adaptarse al nuevo entorno de crisis. Unicamente comunican los elevadísimos costes que soportan y solicitan ayuda para mantenerlos intactos durante tres meses más.
4. Intentan justificar sus necesidades enumerando los elementos por los que se les va el dinero:
"hay que pagar una pasta en hosting, uploading, estudio, requerimientos técnicos, 16 personas..."
¿por qué no justifican también la falta de ingresos?
5. Descargan la responsabilidad de la continuidad de Mobuzz en los usuarios:
"Trabajamos todos los días pensando en ti, así que, por favor, no te hagas el sueco"
¿alguién preguntó a los usuarios si eran necesarios 20 programas por semana?
6. Se dirigen a los usuarios como si estuvieran vendiendo el proyecto a inversores: "tenemos un producto de calidad, tenemos un tráfico de 2 millones de visitas al mes, cinco shows al día cinco días por semana, en tres idiomas..."
¿qué le interesa todo esto al usuario medio de mobuz al que simplemente le piden 'una ayudita'?
7. No explican la razón por la cual inversores de los que han presumido largamente, como Martín Varsavsky y Enrique Dans no invierten o prestan dinero a Mobuzz cuando más lo necesita
¿acaso no confían en el proyecto?
8. No aclaran las razones por las que el resto de inversores que supuestamente habían comprometido su inversión a corto plazo les han dejado en la estacada:
"algunos inversores importantes que están interesados en Mobuzz nos piden algo más de tiempo para tomar decisiones"
¿saben estos inversores que Mobuzz está al borde del cierre? ¿es coherente su interés en Mobuzz con permitir que la empresa quiebre? ¿van a tener más capacidad de invertir en enero? ¿acaso esta campaña es una prueba 'de fuerza' para escarmentar a dichos inversores?
9. Prometen devolver las aportaciones de los donantes únicamente si no se alcanza el objetivo de 120.000 euros en una semana:
"lo más importantes es que si con vuestra ayuda no conseguimos el objetivo, os devolveremos vuestras aportaciones"
¿y si consiguen el objetivo.. no van a devolver la financiación obtenida? ¿van a tratar a sus benefactores peor que a su banco?
10. Se muestran más interesados por la viralidad que por la conversación real con sus usuarios:
"díselo a tus amigos, escribe un post, tuitéalo, ponlo en Facebook, MySpace, Tuenti, publica nuestros banners..."
¿Qué ocurre si alguien no tiene dinero esta semana pero puede aportarlo dentro de 10 días? ¿qué ocurre si un usuario le tiene tanto cariño a Mobuzz que estaría dispuesto a invertir una cantidad elevada en el proyecto? Yo no he encontrado ningún teléfono en la web, ni tampoco indican quienes serían los interlocutores adecuados para tratar estas cuestiones. Sólo aparece su dirección física, y supongo que al 95% de sus espectadores no les encaja bien un viaje urgente a Madrid. Esta es, a mi juicio, la razón de que algunos destacados observadores se llevarán la impresión, en un primer momento, de que se trataba de una burda campaña de marketing viral. Aún hoy, en el 'about' sale un error 404. Tampoco han facilitado que nuevos usuarios atraídos por el ruido generado tengan acceso a sus antiguos shows para conocer mejor el proyecto.
(10. Actualización 7-11-08: a raíz de un comentario de Paul, uno de los trabajadores de Mobuzz, compruebo que ya es posible acceder desde la home a la sección 'about' donde -si bien en inglés- ya figura el teléfono de Mobuzz así como la relación de todas las personas que forman parte del equipo. No obstante, si sigues una navegación distinta te puedes seguir encontrando con dificultades: por ejemplo, pinchando primero en contacto y, ante el impersonal formulario, pinchando en 'about' en segunda instancia, te volverás a encontrar con el error 404)
Casí todos los entrecomillados salen de este video:
Disclaimer: no soy accionista de Mobuzz, ni tengo intereses directos en el proyecto ni tampoco me considero competidor suyo. Veo Mobuzz a diario desde hace 2 años y deseo que el proyecto continúe e incluso me considero amigo y admirador de varias personas vinculadas a Mobuzz. Por eso realicé urgentemente mi aportación y difundí la situación tan ampliamente como pude. Pero no puedo ocultar mi visión crítica de esta campaña. Considero que el asesoramiento recibido no está a la altura de los grandes profesionales que trabajan en Mobuzz.